Las autoridades en materia de salud en Argentina tienen que comprender que la reducción de daños es mejor que la prohibición y que equiparar el vapeo al cigarrillo tradicional seria renunciar a una herramienta eficiente y segura para dejar de fumar y reducir los daños por tabaquismo.
En argentina existe una guerra silenciosa entre la prohibición y la reducción de daños. La misma se manifiesta mediante proyectos que ley que insisten en prohibir una alternativa 95% menos dañina que el cigarrillo convencional y que podría salvar la vida de millones de argentinos. Estamos hablando de Los Sistemas Electrónicos de Administración de Nicotina y Sin Nicotina (SEAN/SN), o comúnmente conocidos como, “Vaporizadores”.
En este caso en concreto hablamos del proyecto de ley que busca modificar la Ley de tabaco (2538/2010) presentado por un Diputado Neuquino que busca aplicar las mismas prohibiciones que se le imponen al cigarrillo convencional al Vapeo. Pero este proyecto es apenas un eslabón dentro de las estrategias de un sector Anti-Tabaco que solo busca la prohibición y no la reducción de los daños que genera el tabaco.
Restringir el acceso a los productos de vapeo, que son 95% menos dañinos, por “precaución» no es una forma viable de proteger la salud pública. Muy por el contrario, amenaza con eliminación de una alternativa que podría acelerar el proceso evolutivo que conlleve a la desaparición de los cigarrillos que matan alrededor de 40000 argentinos anualmente.
Existe una campaña de desinformación en Argentina contra el «Vapeo» y los únicos perjudicados son el orden y la salud pública.
Tras un gran avance en el país en materia de cesación tabáquica (En los últimos 15 años pasamos de 40% de prevalencia a un 22%, según CIENTA) en la actualidad los números vuelven a preocupar, ya que 4 de cada 10 argentinos incrementaron el número de consumo cigarrillos diarios.
Esto se debe, en parte, a una combinación del estado de reclusión y de noticias trágicas, producto de la cuarentena, que alteran la salud psíquica de cualquiera que se encuentre expuesto a ellas.
Pero también, y no menos importante, son estas prohibiciones y constantes campañas de desinformación, realmente hostiles, a alternativas más seguras, lo que impide que los Argentinos accedan a una opción más saludable, y por consiguiente, continúen muriendo en manos del tabaco.
Debemos comprender que para realmente avanzar en materia de cesación tabáquica y lograr una «Argentina libre de humo» las autoridades en materia de salud deben dar un paso atrás, dejar la prohibición en el pasado y avanzar hacia la reducción de daños.
Deben comprender que continuar atacando al cigarrillo electrónico no defiende la salud pública; está causando un daño público.
Vapear es una herramienta eficaz para dejar de fumar
Es comprensible que ante el surgimiento de una nueva tecnología en el mundo las autoridades sanitarias tomen ciertas precauciones al respecto.
Pero cuando hablamos del Cigarrillo electrónico, nos referimos a un instrumento de innovación en materia de reducción de daños del tabaco que ya lleva años en el mercado y demostrando día a día su eficacia para mejorar la salud de las personas.
EXPERIENCIA INTERNACIONAL
Distintos países han aceptado combinar las medidas de prevención y de cesación con herramientas de reducción del daño para que aquellos fumadores que no han logrado dejar de fumar puedan pasarse a productos sin combustión.
INGLATERRA: FREE VAPING
La efectividad de los cigarrillos Electrónicos es tal que el Servicio Nacional de Salud del Reino Unido instruye a los médicos para que alienten a sus pacientes fumadores a que se cambien a vaporizadores.
A los fumadores que quieran dejar de fumar se les puede recetar y luego comprar un cigarrillo electrónico en el mismo hospital.
“Los Cigarrillos Electrónicos son al menos 95% menos dañino que el tabaco” – Salud Publica de Inglaterra.
El sitio web del NHS declara explícitamente:
“Muchas personas encuentran que los cigarrillos electrónicos, también conocidos como vaporizadores, son útiles para dejar de fumar. Los cigarrillos electrónicos no están completamente libres de riesgos, pero tienen una pequeña fracción del riesgo de los cigarrillos. Dejar de fumar con un cigarrillo electrónico es particularmente efectivo cuando se combina con el apoyo personal de expertos“.
FREE VAPING: Hospitales en Inglaterra entregan cigarrillos electrónicos gratuitamente para favorecer la reducción de daños del tabaco.
FRANCIA TE INVITA A DEJAR DE FUMAR VAPEANDO
El gobierno francés, en campaña su anual para dejar de fumar promovida por Salud Pública Francia, desarrollo una página web “Tabac Info Service”, en donde ofrece el vapeo como un método efectivo para dejar de fumar.
Con esta medida las autoridades francesas buscan motivar a los fumadores a dejar el tabaco combustible tan nocivo para la salud.
“¿Por qué usarlo? A diferencia del cigarrillo clásico, el cigarrillo electrónico no funciona por combustión. De este modo, evita las sustancias muy tóxicas que libera un cigarrillo encendido. Es por eso que cuando vapeas el riesgo de desarrollar enfermedades graves disminuye. Tenga cuidado, esto solo es cierto si deja de fumar cigarrillos regulares por completo, porque incluso uno o dos cigarrillos al día representan riesgos para su salud”.
Santé Publique Francia “Tabac Info Service”
NUEVA ZELANDA
Allí se reconoce que los productos de vapeo son instrumentos legítimos y eficaces para dejar de fumar. De hecho, desde octubre de 2019 se venden también en las farmacias.
En sus campañas, el ministerio de Salud señala que, aun cuando el vapeo no es inofensivo, es mucho menos perjudicial que el tabaco tradicional.
En una acción arrojada, el gobierno de Nueva Zelanda también decidió exentar a los líquidos con nicotina de las duras leyes de control del tabaco del país.
“Eso es muy importante ya que cuando los fumadores vayan a las tiendas de conveniencia, verán cigarrillos a un precio muy elevado y cigarrillos electrónicos mucho más baratos.”. Ministro de Salud de Nueva Zelanda, Jonathan Coleman.
Revistas científicas
Según el European Respiratory Journal, otros métodos para dejar de fumar, tales como Fármacos, Chicles de nicotina, Programas grupales, están muy por debajo del 10% de éxito.
Es decir, menos de una de cada diez personas que los usa conseguirá de fumar.
Por otra parte, varios estudios demuestran que con el dispositivo de vapeo pueden ver tasas de abandono exitosas de hasta el 50%.
El prestigioso portal médico Cath Lab Digest afirma que los fumadores tienen el doble de probabilidades de dejar de fumar si usan vaporizadores que si no lo hacen.
JAMA Internal Medicine informa que “el uso diario de cigarrillos electrónicos parece ser útil para iniciar el abandono del hábito de fumar entre las personas que tienen la intención de dejar el tabaco”.
La revista Addictive Behaviors publicó un estudio que afirmaba que “los usuarios diarios de cigarrillos electrónicos tenían 3 veces más probabilidades de dejar de fumar que los que nunca lo hacían”.
La eficacia del dispositivo es evidente: Son menos las personas que fuman porque eligieron vapear.
¿Por qué es importante la regulación?
Regular debidamente los productos de vapeo (Sistema electrónicos de entrega de nicotina y sin nicotina) sería un gran un avance en materia de cesación tabáquica para la Argentina. Es abrirnos paso a la evolución y permitir en el país los beneficios que las nuevas tecnologías nos pueden brindar.
La prohibición nunca es una buena forma de hacer políticas públicas, ni en Argentina, ni en ningún país. Con los debidos cuidados, debemos respetar el derecho a elegir de los Argentinos, de otra manera solo le estaríamos dando paso al mercado negro y los peligros que este acarrea.
Hoy en Argentina se está tratando un proyecto de ley que busca igualar el cigarrillo convencional al vapeo.
Me preocupa que se insista en medidas que han fracasado en obtener sus objetivos. Equiparar el vapeo con el cigarrillo conlleva un grave perjuicio para los de usuarios argentinos que han conseguido abandonar el tabaco gracias al cigarrillo electrónico y esto podría provocar que regresen al cigarrillo convencional.
Tenemos que pensar en una regulación sensata, que no pierda de vista la finalidad del dispositivo de vapeo (reducir los daños del tabaco), y no menos importante, hacer algunos estudios en materia impositiva y otras normativas, ya no sería idóneo que estos afecten negativamente en el consumidor.
Seguir por esta vía prohibitiva fundada en el miedo, el desconocimiento y la desinformación, a mi parecer, es darle la espalda a millones de argentinos que hoy se encuentran en relación con el tabaco. No se les está ofreciendo una alternativa para ayudarles a dejar el tacaco de combustión, y lo que es peor, se les está poniendo trabas para acceder al mismo.
El Ministerio de Salud, los Diputados de La Comisión de Salud, la ANMAT no pueden continuar ignorando esto.
Los argentinos necesitan una alternativa para dejar de fumar.
Por ese motivo debemos dar un paso hacia la innovación y decir:
¡Sí a la regulación!.
Debemos reconocer el valor de estos productos para reducir los riesgos para la salud de los fumadores y darle lugar a un cambio de paradigma, no podemos continuar con esta filosofía de “o dejas de fumar, o morís”.
En Enero de 2021 la Marina Real del Reino Unido implementó una nueva política con el objetivo de que el ejército británico esté libre de humo para 2022.
El uso de vaporizadores de nicotina será permitido para facilitar la cesación tabáquica.
Por ello invito a los legisladores, profesionales de la salud, asociaciones y autoridades sanitarias en el país, a que se informen. Abandonen el prejuicio y el miedo a lo nuevo y demos ese gran paso que nos podría posicionar como un país exitoso en materia de cesación tabáquica.
#ELVAPEOSALVAVIDAS.